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Monday, March 24, 2014

Primera máquina que recicla el unicel en México




Las noticias científicas y tecnológicas que encuentran aquí en IQ provienen de lo que su autor puede leer, escuchar o ver en los días que preceden la publicación de la columna. Generalmente, intentamos presentar noticias nacionales e internacionales que consideramos de interés y que no forzosamente encuentran en todos lados. La noticia de hoy es una que ya ha salido en las noticias de varios medios pero que vale la pena presentar, con el riesgo de que ya la hayan leído antes. Trata de una invención mexicana de una máquina que recicla el unicel comercial desechado para producir esferitas reutilizables en la producción de otros nuevos objetos de plástico. Es el primer diseño de este tipo de máquina en el país y se desarrolló en la UNAM.


  

REPS-01...
Es el nombre que Héctor Ortiz Chávez y Jorge Luis Hinojosa Magaña dieron a la máquina que recicla el unicel que inventaron. El nombre significa Reciclaje de EPS, prototipo 01, ya que EPS es el nombre tecnológico del unicel (por sus siglas en inglés “expanded poly-styrene”). Fue presentada oficialmente en una conferencia de prensa en el Centro de Ingeniería Avanzada de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México, de la cual  Héctor y Jorge Luis son (todavía) estudiantes en la carrera de Ingeniería Mecánica. Es un orgullo para sus profesores y para todos los académicos ya que es exactamente el tipo de proyectos que se buscan actualmente en la universidad: aquellos que combinan la academia y la investigación científica con el desarrollo tecnológico y el vínculo con el sector empresarial. De hecho, en la entrevista que dieron ese día a Radio UNAM, los dos jóvenes explicaron que ya tienen registrada su marca y su empresa llamada Rennueva* con gran presencia en las redes sociales también. En este caso, entonces, el vínculo con el mundo empresarial lo hicieron directamente con ellos mismos para crear su nicho. Como es la primera máquina de este tipo en el país, se puede pensar que será un éxito.

El prototipo 01 se desarrolló integralmente en la UNAM, con piezas 100% mexicanas (dicen sus inventores). Incluso algunas partes requirieron de un diseño propio que tardó varios meses en optimizarse en la Facultad de Ingeniería. Por lo tanto, REPS-01 se quedará en la universidad nacional y hará de ella una pionera a nivel mundial para reciclar uno de los plásticos comerciales más usados actualmente… y probablemente uno de los más contaminantes porque no se degrada rápidamente. Es un hecho importante ya que el unicel tiene una gran capacidad de reciclarse pero su reuso no suele pasar a pesar de grandes virtudes prácticas: es ligero, buen aislante térmico, no se pudre e impide el crecimiento de microorganismos. Es también por todo eso que se utiliza tanto en plásticos para comida y bebidas. Solamente en México se piensa que se producen más de 300 mil toneladas de unicel al año (!)

Tomando esos datos en cuenta y analizando las posibles rutas para reciclar el EPS o unicel, los futuros ingenieros Ortiz e Hinojosa diseñaron esta máquina capaz de transformar el unicel comercial ya utilizado y desechado en pelotitas reutilizables para construir otros objetos plásticos como reglas, envases, cajas, etc. Utilizando un proceso de calor controlado pudieron efectivamente recuperar la materia útil del unicel, que se conforma de 95% aire y 5% poliestireno, comprimirla y luego estirarla para formar esferitas de unos milímetros de diámetro llamadas pellets. Con la ayuda de los académicos de su facultad y de la empresa DART de México pudieron fabricar su máquina y ponerla a prueba exitosamente. Como buenos emprendedores, evaluaron también el impacto del material en la sociedad, el ambiente y hasta en el sector industrial ya que es un mercado multimillonario. Se analizó finalmente el potencial, en cuestión de creación de empleos por ejemplo, de un posible reciclado del unicel y se convencieron de que REPS-01 era una real necesidad hoy en día. Pusieron todos sus esfuerzos en desarrollar una máquina hecha en México, de bajo costo de fabricación, operación y mantenimiento, que sin lugar a duda será un éxito. REPS-01 fue regalada a la UNAM y se quedará en Ciudad Universitaria. Esperemos que se usará mucho y que tendrá muchas hermanas en todo el país.



* Más información: www.rennueva.mx
no confundir con Rennova que también vende pellets reciclando desechos...

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